La parálisis del sueño es un fenómeno del que casi nadie se
escapa de sufrirlo al menos una vez en la vida. Puede que tú también lo hayas
vivido alguna vez sin saber lo que era. Hablamos de esa sensación de angustia
en la que, estando en la cama, eres incapaz de mover tu cuerpo o de ni siquiera
articular palabra.
Este fenómeno suele suceder casi siempre estando consciente,
entre la vigilia y el sueño o viceversa, cuando estamos quedándonos dormidos o
justo antes de despertarnos. Su duración no suele ser de más de tres minutos y
no es peligroso ya que nuestro sistema respiratorio sigue funcionando con
normalidad.
El motivo por el que experimentamos esta sensación no está
del todo claro. A veces se relaciona con otra enfermedad relacionada con el
sueño: la narcolepsia. Pero lo más habitual es que la parálisis del sueño
ocurra en épocas de gran ansiedad o por herencia familiar. Otra causa de esta
parálisis es que en muchos casos esta inmovilidad está acompañada de
alucinaciones.
Si te ves en esta situación lo mejor que puedes hacer es
relajarte y tranquilizarte para poder salir de esa situación cuanto antes.
Intenta mover las extremidades poco a poco. Cuando ya hayas conseguido salir de
esta situación, procura quedarte despierto unos minutos más antes de volver a
intentar dormirte. para no volver a padecer la parálisis. Esto evitará que te
vuelta a suceder al rato.
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